Delicias Danzantes: Comida y Tecnología se Fusionan en una Cena Interactiva
Un innovador proyecto de la Universidad de Monash está llevando la experiencia culinaria a un nuevo nivel al hacer que la comida «baile» en los platos, ofreciendo oportunidades interactivas y lúdicas tanto para comensales como para chefs.
El estudio de investigación, publicado en las Actas de la Conferencia ACM Designing Interactive Systems 2023, explora la posibilidad de diseñar alimentos como un material que pueda ser programado a través de la tecnología informática.
Jialin Deng, investigador de diseño de interacción alimentaria y autor principal del estudio, desarrolló un sistema que incluye platos equipados con electrodos que pueden programarse para mover diversos elementos alimentarios, como salsas y condimentos, de manera autónoma. Esto permite crear de manera lúdica nuevas combinaciones o elementos para los comensales.
Deng explicó que el proyecto busca la integración de las propiedades materiales de los alimentos con las capacidades «computacionales», con el objetivo de ofrecer experiencias gastronómicas únicas. Un chef puede predefinir la ubicación de elementos en el plato y programar movimientos cuadro por cuadro, similar a la animación.
Este enfoque innovador permite fusionar productos sólidos y líquidos, mezclar sabores, transportar ingredientes al plato y jugar con reacciones químicas o físicas, como las que se encuentran en la gastronomía molecular.
El profesor Florian «Floyd» Mueller, experto en diseño de interacción y juegos, sostiene que esta investigación representa una visión del futuro de la comida y la informática. La integración de alimentos y tecnología tiene el potencial de transformar la industria hotelera al crear experiencias culinarias más atractivas y contar nuevas historias a través de alimentos interactivos. Además, podría cambiar la educación en informática, permitiendo a los estudiantes aprender sobre computación de una manera única al relacionarla con la comida.
Los investigadores colaboraron con chefs en talleres de codiseño, brindándoles la oportunidad de experimentar con el sistema para crear nuevas combinaciones culinarias. Los platos resultantes se presentaron en eventos gastronómicos posteriores.
Matthew Birley, jefe de cocina del Monash Club y participante en el taller, destacó que la fusión de tecnología y comida abre nuevas dimensiones en la creación de platos y permite una interacción más profunda entre los comensales y la comida. Esta innovación promete tener un gran impacto en la industria gastronómica al ampliar las posibilidades culinarias de los chefs y la experiencia de los comensales.